La jueza municipal de faltas Dra. Julia Acosta compartió en el programa radial Dos y Pico la experiencia que le tocó pasar como vecina de la ciudad anoche, con una fiesta clandestina.
Relató que eran las 3 de la mañana y nadie en su casa podía dormir porque el volumen de la música hacía vibrar los vidrios y se escuchaban gritos de personas alcoholizadas. Salió afuera y detectó que el ruido provenía de una casa ubicada en calle Gaboto entre Garrahan y José Hernández donde presume que había unas 60 personas reunidas en una casa de familia. La jueza manifestó que llamó tres veces a la GUM sin poder comunicarse, luego al 911, y se quedó unos 20 minutos afuera de la vivienda mientras los jóvenes empezaban a retirarse, la mayoría en autos y en estado de ebriedad. Cuando la policía llegó ya no quedaba nadie. GUM respondió el llamado minutos más tarde explicando que tuvieron denuncias similares en varios barrios de la ciudad como Tierra de Sueños, Acevedo y Bote Club.
Finalmente, la abogada observó con preocupación la falta de controles de tránsito durante la madrugada: "¡No saben en qué estado se fueron esos 20 autos!", manifestó.