Seguinos en Facebook Instagram Twitter
cielo claro cielo claro 23°C

Villa Constitución: la asaltó, le pidió disculpas y le dijo que robaba para "la iglesia"

Una comerciante sufrió el quinto robo en su local comercial pero nunca antes se topó con un asaltante tan extraño. El sujeto la bendijo, la amenazó, le pidió perdón por robarle y luego le confesó que robaba para una iglesia.

Foto: Diario El Sur

Foto: Diario El Sur

Un asalto que fue calificado por la propia víctima como de “muy bizarro” ocurrió el viernes por la tarde en una agencia de loterías ubicada en Dorrego 1953, Villa Constitución. La propietaria es María Clara Carrillo, quien con este hecho suma 5 robos en el local, dos de ellos escruches y tres cara a cara con los delincuentes. “Esto fue el viernes a las 6 y media pasaditas, yo estaba armando la cartelería de la quiniela y cuando me di vuelta tenía una persona parada en la puerta (se abre con un portero eléctrico). Me di cuenta que era el chico que habitualmente está sentado en la vereda de enfrente y le abrí”, contó a Diario EL SUR la comerciante.

“Pensé que venía a comprar, venía sin gorrita, sin lentes, sin nada que le tapara la cara. Me ha pasado que ha venido otro ‘famoso’ a comprar cigarrillos, compraba y se iba. Deja un bolos negro sobre el freezer (el local también cuenta con kiosco), se para frente al mostrador y tranquilamente me dice: – ‘Dame todo lo que tenés porque tengo un arma y estoy dispuesto a todo”, detalló Carrillo. Según la comerciante el joven efectúo un movimiento dando a entender que llevaba el arma en su cintura pero nunca la exhibió. “Tuve la misma actitud que tuve con el otro robo, le dije vení acá y agarrá la plata de la caja”, aseguró.

“Lo único que le dije –continuó Carrilllo–, es que hiciera rápido y no me hiciera nada porque estoy embarazada, le mentí, es lo único que se me ocurrió. Entonces me dijo, tocándome la panza: -‘No mamita, ¿cómo te voy a hacer algo, yo también soy padre?’. Fue todo muy bizarro”. Añadió que le “llamó la atención” la tranquilidad con la que actuaba el delincuente a diferencia del robo anterior donde el asaltante se mostraba nervioso y alterado. “Yo quería que se vaya, no quería que entrara gente, clientes, algún familiar. La caja se cayó al piso, juntaba las monedas. Y le digo: -Ya tenés mucha plata, andate que va a entrar gente”.

Ladrón sin miedo

“Y bueno, si entra gente se armará”, le contestó el maleante que seguía actuando con toda parsimonia. Ya con el botín en su poder le exigió a la comerciante que le entregara el teléfono pero ella le dijo que se lo había llevado su marido, quien salió del local minutos antes. Entonces “empieza a decirme: -‘Mamita, ahora vos te vas a quedar tranquila, no vas a salir. No me vayas a denunciar a la Policía porque yo vuelvo. Mirá que yo te conozco, se dónde vivís, dónde trabajás, tus horarios. Si vos me denunciás yo vuelvo”. A lo que Carrillo le respondía que se quedara tranquilo, que ella no iba a salir, que iba quedarse en el local y que iba a tomar un vaso de agua porque se sentía descompuesta.

“Perdoname”

Antes de irse el ladrón “se para frente mío, me toca la panza de nuevo y me dice: -‘Que Dios te bendiga’, y otras cosas así. Y en un momento me agarra las manos y me dice:-‘Perdoname’. Y antes de irse se para y me mira y me dice: – ‘En realidad yo robo para la iglesia’. Y se va”. Una vez en la calle el sujeto intentó que un joven con una moto lo llevara hasta barrio Unión, asegurándole que le iba a pagar el viaje, pero ante la negativa del motociclista, el delincuente huyó a pie por Av. Presidente Perón. Por otra parte Carrillo se mostró indignada al saber que este individuo cuenta con pedido de captura y pese a ello estuvo toda una semana sentado en Dorrego al 1900 sin que ningún efectivo policial lo advirtiera.

Fuente: Diario El Sur

Noticias Relacionadas

Comentar

Archivo de Noticias