La medida de fuerza fue lanzada por la Unión Tranviarios Automotor (UTA) en todo el país y regirá desde las 22 del martes 2 de agosto hasta las 6 del miércoles.
La Unión de Tranviarios Automotor (UTA) anunció un paro nacional de colectivos que regirá desde las 22 del martes 2 de agosto hasta las 6 de la mañana del miércoles. La medida de fuerza afectará al transporte urbano de pasajeros de Santa Fe y Rosario.
Los motivos del paro de colectivos tiene que ver con un reclamo en mejoras salariales para los choferes. La semana pasada hubo un pedido formal a las empresas de transporte para que paguen un bono de 25 mil pesos a los trabajadores para afrontar los efectos de la inflación. Este planteo fue rechazado por los empresarios y fue el desencadenante de este paro nocturno.
“Ponemos en conocimiento de las autoridades y de la opinión pública en general, que los trabajadores nos vemos obligados a tomar medidas antipáticas para cuidar el poder adquisitivo de nuestros salarios y exigimos ser oídos”, señalaron desde el gremio a través de un comunicado firmado por el secretario general de la UTA, Roberto Carlos Fernández.
El paro se da también en la semana en la que empezaron a regir las nuevas tarifas en el transporte público del Área Metropolitana de Buenos Aires (Amba). De acuerdo a la resolución publicada en el Boletín Oficial, los costos del boleto en esa región sufrieron un incremento promedio del 40 por ciento, lo que llevó el pasaje a los 25 pesos.
El presidente agradeció el respaldo de EE.UU. a sus reformas y envió un fuerte mensaje electoral. “La situación es clarísima”, advirtió en sus redes sociales
El ministro de Gobierno, Fabían Bastía, anticipó que garantizarán que las escuelas estén abiertas y habilitarán la declaración jurada para quiénes quieran trabajar. “Tiene que quedarle en claro a la ciudadanía santafesina que el paro lo vuelve a fijar Baradel”, sostuvo
¡Una historia que emociona y nos recuerda el valor de la amistad incondicional!
La OMS estimó el uso mundial de cigarrillos electrónicos y las cifras son alarmantes: más de 100 millones de personas en todo el mundo vapean actualmente