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Se lo llevaron de la puerta de la casa a plena luz del día. Se lo habían robado en octubre, lo recuperó en noviembre y ahora se lo vuelven a robar.
El VW Bora fue sustraído de la puerta de la casa. Foto Archivo AD
El robo se dio el miércoles 20 de febrero en horas de la tarde, el automóvil marca Volkswagen Bora color blanco estaba estacionado sobre la vereda en el ingreso al garaje de la vivienda familiar de calle General López al 200 de esta ciudad.
Inmediatamente al advertir el robo, la policía tomó conocimiento del hecho y se contactó con la Sección de automotores de la policía de Rosario para que también se aboque a la investigación del caso que quedó caratulado como hurto calificado de vehículo.
Pero lo increíble del caso es que es la segunda vez en poco tiempo que al empresario Miguel Nozzi le sustraen el rodado. Incluso lo había recuperado hace solo unos meses y nuevamente se lo vuelven a llevar.
Ante la consulta con las autoridades policiales si se especula que podría ser la misma banda que operó tiempo atrás cuando la familia sufrió un asalto, Silvio Cortés Sub Comisario dijo “podría ser porque en el primer hecho de robo le habían sacado la llave original del vehículo y cuando lo recupera este señor se manejaba con el duplicado así que no le cambió la combinación de la cerradura ni de la alarma así que podría ser la misma banda que actúo en un primer momento”.
La denuncia ya quedó radicada en la comisaría de Arroyo Seco pero por el momento no hay datos sobre el vehículo.
La noche del 9 de octubre pasado, en la casa familiar de General López al 200, ladrones, que aparentemente se movían a pie y trabajaron con la cara descubierta, ingresaron a la casa cuando el hijo de la familia junto a su novia estaban entrando el auto. Después de intimidarlos y de maniatarlos. Revolvieron toda la vivienda y se alzaron con todo lo que pudieron computadoras, televisores, DVD, celulares y algo de dinero en efectivo. Así mismo cortaron los cables del teléfono para dejarlos incomunicados. Además de darse a la fuga con el Bora blanco del padre de familia que junto a sus hijos se encontraba en la propiedad.
A casi un mes después, en noviembre, se toma conocimiento del hallazgo del VW Bora que estaba en una zona de complejo de vivienda camino a Ibarlucea sobre la Ruta 34, en proximidad a la Iglesia del Padre Ignacio. Aparentemente el rodado estaba a la venta y logró ser recuperado por personal policial de Rosario. En ese momento se mencionó además que habían apresado a un masculino del cual se desconocía la identidad pero que rápidamente quedó en estado de libertad.
En esa ocasión el coche estaba casi en perfectas condiciones y después de una serie de trámites volvía a circular por las calles de la ciudad hasta hace solo unos días.
La víctima estaba internada en el hospital Eva Perón de Granadero Baigorria desde el pasado 20 de octubre cuando intentó frenar una pelea a la salida del salón de eventos donde festejó los 15 su sobrina. Después de múltiples golpes, un joven de 19 años le propinó una patada en la cabeza mientras estaba en el piso. Este domingo se confirmó su deceso
Claudina se presentó en el Instituto Médico Legal para reconocer el cuerpo de su hija. "No puede seguir pasando esto, ni en San Lorenzo ni ninguna otra parte del país. Basta”, dijo.
El jefe de la Policía de Investigaciones, Natalio Marciani, confirmó que uno de los detenidos en la noche del jueves fue quien aportó información que les permitió encontrar el cadáver de la joven. “Todos nos hace presumir que la muerte fue cercana al día de la desaparición”, señaló
Lo halló la Policía de Investigaciones tras allanamientos que realizó en la noche de este jueves en Puerto General San Martín, donde había sido secuestrado un 308 gris que se presume que tendría relación con la desaparición de la joven de 20 años que había sido vista por última vez el 30 de octubre.
Se trata de Kevin Leonardo Ayala, quien además está investigado como posible partícipe en el homicidio del policía Andrés Farías, que tuvo lugar el pasado 27 septiembre en Fisherton. Al momento de ser acusado en Rosario tenía la llave de unas esposas en su ropa interior
