El tribunal Oral criminal 1 de Morón rechazó el pedido de recusación a los jueces y al fiscal por parte del cura, condenado en triple instancia a 15 años de prisión por abuso sexual y corrupción de menores, y también el de nulidad de la audiencia de hoy. Por el momento, se está a la espera de la resolución sobre la situación de Grassi.
La resolución del TOC, que se dará a conocer a las 19, deberá determinar si Grassi va en forma inmediata a prisión, si se adopta algún régimen de arresto domiciliario o continua con la libertad morigerada de la que goza en la actualidad.
La audiencia, prevista en principio para las 13, fue pospuesta a raíz de una presentación de la defensa de Grassi, que intentó recusar a los integrantes del Tribunal y pedir la nulidad de la audiencia alegando "enemistad manifiesta", pero esas peticiones fueron rechazadas por el TOC.
El fiscal el juicio, Alejandro Varela, aseguró durante su exposición que la presunción de inocencia de Grassi "quedó prácticamente destruida" al resolverse la condena del sacerdote a 15 años de prisión en tres instancias, incluida la Suprema Corte bonaerense.
"Ha variado la situación del acusado por lo que no hay que esperar que el peligro de fuga se concrete para presentar un pedido de detención", agregó Varela quien destacó que el sacerdote "tiene los medios económicos suficientes" como para irse.
Sergio Piris, abogado defensor de "Gabriel", víctima de abuso de Grassi, destacó que a lo largo de los 10 meses que duró el proceso "el sacerdote tuvo todos los privilegios, parecía un actor de cine que daba reportajes, mientras la víctima tuvo que volver al régimen de protección de testigos".
El abogado que representa a los derechos de los niños a través de Comité Argentino de Seguimiento y Aplicación de la Convención Internacional de los Derechos del Niños (CASACIDN), Juan Pablo Gallego, manifestó que la situación judicial de Grassi "ya es irreversible".
"El cura es un ser antisocial al que se le permitía ingresar libremente a la escena del crimen y su libertad vigilada sólo sirvió para apretar testigos y atacar a sus víctimas", remarcó.
Indicó además que este "es el proceso más importante contra un sacerdote católico y la sociedad necesita una respuesta que haga cesar los privilegios que tuvo este pedófilo en un proceso que fue escandaloso".
Al hacer su alegato final, Grassi acusó al fiscal Varela de mentiroso al mencionar supuestas amenazas y reiteró que siempre se sometió a proceso" por lo que "no existe peligro de fuga" al tiempo que señaló que "toda la causa está armada".
Grassi negó ante el Tribunal que haya sido sometido a un proceso canónico por la condena de abuso sexual al responder preguntas del juez.
El sacerdote fue condenado por el TOC 1 en junio del 2009 a 15 años de prisión por haber abusado de un menor que alojaba en guarda judicial en la Fundación Felices los Niños y la condena fue confirmada en tres instancias, pese a lo cual continúa con el régimen de libertad morigerada en una casa quinta en la localidad bonaerense de Hurlingham.
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