Fue el domingo por la tarde al igual que en otro domicilio de la misma cuadra. En ambos casos los malvivientes ingresaron por las puertas de frente y sustrajeron elementos electrónicos y alhajas, entre otros.
Arroyo Seco.- Luciano Oppedisano vive junto a su familia sobre calle Filiberti al 300 y el domingo tras ausentarse de su casa tan solo una hora, fue víctima de un “escruche”.
En diálogo con Arroyo Diario contó, “el domingo salimos de la casa al mediodía, llegamos a la 1 de la tarde, encontramos el portón abierto y la puerta forzada. Entró gente a robar, encontré todo el ropero con los cajones y la ropa toda tirada, tanto en la pieza de la nena como en la mía”, como así también el baño y el negocio que tiene pegado a su casa estaban revueltos.
Como consecuencia, los ladrones que descalzaron sin ningún problema el portón del frente de la casa, se llevaron “una notebook, un celular, anillos de oro”.
Si bien admitió que no tiene sospechas sobre quienes podrían haber ingresado a su domicilio, estima que lo han estado vigilando “a la casa o a mí” y que según comentarios se habló “de un auto blanco y de gente sospechosa pero yo no vi nada”, remarcó.
Lo llamativo es que este no fue el único caso de robo en proximidad a la casa de Luciano, ya que una familia de Bomberos Voluntarios al 60 Bis también sufrió un hecho de similares características. “A la vuelta de mi casa a una familia también le robaron y entraron como a mi casa. De la misma manera que a mí, lo único que no tenían rejas. Le han forzado la puerta del frente y le han entrado a las piezas y a los dormitorios”, comentó y agregó con énfasis “en una hora robaron dos casas”.
La denuncia de ambos hechos quedó radicada en la Seccional 27ma.
La víctima, de 22 años, se encuentra internada en el Heca con el 35% de su cuerpo quemado. La madre de uno de los sospechosos fue quien denunció el ataque ante la policía.
La pequeña se encuentra en estado crítico tras recibir el impacto del proyectil. La situación es preocupante y se prevé una operación para evaluar su condición.
Los robos se detectaron después de la hora cero del jueves en Cadaqués, cuando los damnificados llegaron a sus domicilios y notaron gran desorden. Personal de seguridad notó la apertura de un cerco perimetral en la parte trasera del predio.
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