Sucedió en un inquilinato ubicado en Corrientes al 300. La víctima tenía 22 años y fue encontrada tirada en la cama de su habitación con signos de haber sufrido una feroz golpiza.
La seccional de Dorrego al 100 lleva adelante las actuaciones junto con al Brigada de Homicidios. Foto: archivo La Capital
Rosario.- Un hombre de 22 años fue hallado sin vida anoche en una pensión de Corrientes al 300 con signos de haber sufrido terribles golpes en la cabeza. Se trata de una persona de nacionalidad peruana que trabajaba como vendedor ambulante. Por el momento no hay precisiones de lo que pudo ocurrir en la habitación donde la víctima fue encontrada.
El homicidio ocurrió en una pensión ubicada en Corrientes 345. La víctima fue identificada como Juan Carlos Mendoza Contreras, de 22 años, quien fue hallado sin vida anoche, alrededor de las 23, por un vecino del mismo alojamiento.
La víctima estaba recostada en la cama de su habitación, y de acuerdo al informe preliminar del médico forense presentaba signos de haber recibido gran cantidad de golpes en la cabeza, efectuados con algún objeto contundente.
Según trascendió, Mendoza Contreras se ganaba la vida como vendendor ambulante y se había establecido en esa pensión hacía pocos meses.
La víctima ingresó a un sanatorio privado de la ciudad con lesiones en distintas partes del cuerpo y una hemorragia interna. Tras tomar declaración a testigos, la fiscal Pairola ordenó la detención de una sospechosa de 76 años.
La víctima tenía 52 años y fue encontrada en una de las habitaciones de su casa, tapada con frazadas y en avanzado estado de descomposición. Vecinos denunciaron que la última vez que la vieron con vida fue el 26 de abril cuando discutía con un hombre al que le alquilaba un dormitorio y que nunca más se lo vio por el lugar.
Fueron arrestadas en procedimientos que realizó la Policía de Investigaciones en Zeballos al 4600 y Pellegrini al 3100. Se trata de dos mujeres que habían sido objeto de una denuncia interna en mayo de 2022. Interviene la fiscal Viviana O'Connell, que las llevará a audiencia imputativa.
Se trata de un joven de 26 años que fue ingresado en el Heca con balazos en el rostro y el tórax. Debió ser intervenido. El estado de los otros ocupantes del vehículo.
Dos hombres y una mujer habían sido demorados en el marco de la investigación de los hechos ocurridos el sábado a la madrugada. Sin embargo, el fiscal no encontró elementos objetivos que los relacionen con los episodios. Siguen las pericias y búsqueda de pruebas.