Sucedió en Urunday al 1100, en la zona norte de Rosario. Los maleantes redujeron al dueño, a empleados y a clientes y huyeron en el auto de una mujer.
La seccional 10ª, donde se labraron las primeras actuaciones por el atraco en Urunday al 1100. Foto: Archivo La Capital
Rosario.- Un grupo de siete delincuentes irrumpió en una distribuidora de plantas y macetas de la zona norte de Rosario y tras reducir a varias personas que se encontraban en el lugar lograron alzarse con unos 50 mil pesos en efectivo.
Fuentes policiales indicaron a La Capital que el asalto se produjo ayer en Urunday al 1100 (Rondeau al 3700), en un negocio dedicado a la venta y distribución de plantas, flores y macetas. Una banda de siete hombres armados con revólveres y pistolas ingresaron en el negocio y sin mucho esfuerzo dominaron al dueño, Angel L., de 62 años, y a empleados y clientes.
Los hampones llevaron al propietario hasta su casa que está al lado del negocio y allí se apoderaron de unos 50 mil pesos en efectivo. Después, la banda huyó en el automóvil marca Audi de una de clienta. Los voceros consultados indicaron que el coche apareció horas después abandonado por calle Darregueira.
El hecho fue denunciado en la seccional 10ª.
La víctima ingresó a un sanatorio privado de la ciudad con lesiones en distintas partes del cuerpo y una hemorragia interna. Tras tomar declaración a testigos, la fiscal Pairola ordenó la detención de una sospechosa de 76 años.
La víctima tenía 52 años y fue encontrada en una de las habitaciones de su casa, tapada con frazadas y en avanzado estado de descomposición. Vecinos denunciaron que la última vez que la vieron con vida fue el 26 de abril cuando discutía con un hombre al que le alquilaba un dormitorio y que nunca más se lo vio por el lugar.
Fueron arrestadas en procedimientos que realizó la Policía de Investigaciones en Zeballos al 4600 y Pellegrini al 3100. Se trata de dos mujeres que habían sido objeto de una denuncia interna en mayo de 2022. Interviene la fiscal Viviana O'Connell, que las llevará a audiencia imputativa.
Se trata de un joven de 26 años que fue ingresado en el Heca con balazos en el rostro y el tórax. Debió ser intervenido. El estado de los otros ocupantes del vehículo.
Dos hombres y una mujer habían sido demorados en el marco de la investigación de los hechos ocurridos el sábado a la madrugada. Sin embargo, el fiscal no encontró elementos objetivos que los relacionen con los episodios. Siguen las pericias y búsqueda de pruebas.