No debió enfrentar tormenta alguna, como estaba previsto. El calor persistió durante Nochebuena y muchos optaron por la mesa afuera. A la tarde el termómetro alcanzó los 45,7º
Noche de paz, noche con estrellas. Nada de lluvias ni vientos ni piedritas, como estaba anunciado. Papá Noel no tuvo inconveniente en repartir los regalos y abajo, Rosario pudo celebrar con calor pero sin tormentas.
A la tarde, la previa navideña indicaba la posible llegada de tormentas fuertes a la región. A las cuatro de la tarde, aún con el cielo nublado, la temperatura era de 36,5 grados y la sensación térmica, mucho mayor: 45,7. Fue el pico del termómetro en este abrasador lunes 24.
Después del calorón, parecía que vendría la lluvia, probablemente en medio de un temporal desde la Nochebuena. Según el informe del Servicio Meteorológico Nacional (SMN) la ciudad de Rosario estaba incluida en un alerta.
Si bien la humedad era relativamente baja para esta zona, la presión atmosférica también lo era (a la noche se ubicaba por debajo de los 990 hectopascales) y el aire en la ciudad se volvía irrespirable.
La secretaría de Protección Civil informó que existía un aviso por temporales fuertes o severos. Según el detalle emitido por el SMN a las 15.30, abarcaba al sur de Santa Fe, sur de Córdoba, sur de Entre Ríos, La Pampa, centro y este de Mendoza, sur de San Luis, Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Río de la Plata y provincia de Buenos Aires.
“Aire caluroso, muy húmedo e inestable continúa ingresando al área de cobertura desde el norte del país. Dentro de esta masa de aire se están desarrollando tormentas”, señalaba el parte.
Y anunciaba: “Las condiciones tenderán a mejorar de oeste a este durante el transcurso del martes”.
Con 46 casos confirmados y probables en lo que va de 2025, Santa Fe es la segunda provincia más afectada después de Buenos Aires. El sur provincial suma riesgo tras las inundaciones por la tormenta de Santa Rosa
El inicio, poco antes del mediodía de este jueves, fue en una playa de estacionamiento de camiones cerca del centro urbano de la ciudad ubicada a unos 52 kilómetros de Rosario. El combustible encendido comenzó a derramarse por la zona.
Alejandra, la titular de Sophies Pattiserie, denunció el miércoles que ocho jóvenes consumieron en el bar, pero la estafaron. Este jueves, una de las implicadas fue al local y pagó la cuenta.
La masiva caravana partió desde la planta “General Savio” (ex-Somisa) y copó el centro de la ciudad en rechazo al apagado del alto horno, los despidos y la precarización laboral que enfrentan más de 1.200 obreros tercerizados del Grupo Techint.