El concejal rosarino, Sebastián Chale, propone que los automovilistas que dan positivo el control de alcoholemia deban realizar cursos de prevención y capacitación sobre conducción responsable.
Rosario.- El concejal radical Sebastián Chale presentó un proyecto para que todos los infractores por alcoholemia deban realizar cursos de prevención y capacitación sobre conducción responsable. “Consideramos que la educación sistemática constituye uno de los pilares principales de acción pública para la seguridad vial y la prevención de accidentes”, estimó el concejal, quien añadió: “Hoy quien comete una infracción por conducir alcoholizado sólo debe abonar una multa y tiene una inhabilitación de 10 días, como mínimo. Con esta propuesta buscamos profundizar la concientización vial”.
“De los tres componentes que interactúan en el sistema de tránsito (el ser humano, el vehículo y el ambiente), el ser humano es el causante principal de los siniestros. Así, 9 de cada 10 accidentes viales son producto de un error humano. Por eso, resulta un objetivo prioritario dar solución a esta problemática a partir de acciones que contribuyan efectivamente a disminuir el número de víctimas de accidentes de tránsito. En este sentido, la educación es un factor fundamental para la prevención y la sensibilización”, argumentó Chale.
En Rosario, las infracciones por alcoholemia están penadas con multas de entre 600 y 1.940 pesos, además de inhabilitación de entre 10 días y 4 años, en caso de reincidencia. “Sin embargo, creemos que hay que incorporar un complemento de educación, llamando a la reflexión de los conductores. De hecho, dentro del Concejo existen diversos antecedentes que ponen en valor la educación vial como medio de prevención de los accidentes”, agregó el autor de la iniciativa.
De acuerdo a este proyecto, los cursos estarán a cargo de la Municipalidad de Rosario y tendrán un mínimo de 4 horas, mientras que su asistencia será de carácter obligatorio para todos los infractores por alcoholemia. Los contenidos de la capacitación pondrán especial énfasis en los riesgos de la conducción bajo efectos de alcohol y estupefacientes, y también abordarán aspectos legales, actitudinales y aptitudinales.
Límite permitido
Los conductores de vehículos no pueden superar los siguientes límites de alcoholemia: para la conducción de un automóvil, 0,5 g de alcohol por litro de sangre; para la conducción de motos y ciclomotores, la tolerancia se disminuye a 0,2 g/l; y para quienes conducen transporte de carga o de pasajeros se prohíbe conducir con cualquier cantidad de concentración de alcohol en sangre, es decir, tolerancia 0.