El recorrido de los atacantes que el martes a la madrugada dispararon contra la casa y una farmacia del presidente comunal de Alvear quedó registrado por el sistema de monitoreo de la ciudad. Las cámaras detectaron los movimientos de una moto roja usada en una búsqueda previa y, casi una hora después, la llegada de otra moto negra desde la cual tiraron seis tiros en la esquina de San Martín y Roma. Las dos tenían la patente tapada. Pero la primera perdió la cinta que ocultaba algunos dígitos al pasar sobre un lomo de burro. A partir de ese dato llegó la investigación al arresto de un joven de 18 años que este jueves fue imputado como quien trasladó al tirador.
Nicolás Martín L. fue detenido el miércoles en la casa de Villa Gobernador Gálvez donde vivía con su madre. Es el titular de la moto Honda Wave roja detectada en una primera incursión que realizaron por Alvear dos motociclistas que iban con sus rostros a la vista. En la casa de una hermana del imputado se incautó otra moto negra y azul como la usada para disparar. Aunque no hay certeza de que haya sido la que emplearon los tiradores porque en este caso lograron mantener tapada la patente.
El joven de 18 años y sin antecedentes penales fue imputado este jueves por el fiscal Franco Carbone como quien manejaba la moto desde la cual disparó el acompañante. Quedó acusado como autor de una intimidación pública agravada por el uso de arma y la participación de un menor de edad, daño y portación ilegal de un arma de guerra. Delitos que prevén de 3 años y medio a 16 años y medio de prisión. La jueza Valeria Pedrana calificó el ataque como de “suma gravedad” y le dictó la prisión preventiva por el plazo legal de dos años.
Hay otro sospechoso de ser el autor de los disparos que está prófugo. Es un chico de 17 años. Según planteó fiscal en la audiencia realizada en el Centro de Justicia Penal, cuando L. fue detenido por agentes de la Policía de Investigaciones y de la subcomisaría 8ª de Alvear el muchacho expresó que había tirado otro muchacho al que le dicen “Wense”, de quien desconocía el nombre, de apellido D. Los policías fueron a buscar al adolescente a una pensión del barrio Tablita 1 de Villa Gobernador Gálvez. Se encontró su documento pero él no estaba. Tiene un pedido de captura emitido por un juzgado de Menores.
“Estamos aportando como comuna toda la información que nos pidió la Fiscalía. Tuvieron mucho que ver las imágenes que captó el sistema de monitoreo que hemos implementado hace un año “, dijo el presidente comunal de Alvear, Carlos Pighín, antes de entrar a la audiencia que presenció junto a algunos funcionarios.
La madrugada del martes despertó con el ruido de los disparos y al salir a la calle encontró dos perforaciones en la persiana de una farmacia de su familia lindera a su casa, donde estalló una vitrina. En la vivienda donde dormían su esposa e hijo impactaron otras tres detonaciones e ingresaron dos plomos. Fueron seis tiros calibre 9 milímetros. Tres plomos deformados quedaron en el lugar.
Los motivos del atentado aún no están claros. Para Carbone, el detenido es quien manejaba la moto pero se ignora la finalidad del ataque: “No sabemos el móvil todavía, quién los contrató, cuánto les pagaron”, dijo, además de definir el hecho como un “acto de gravedad institucional inusitado”.
El fiscal recordó que en la reciente acusación a Cristian Nicolás “Pupito” Avalle, un preso que es segunda línea de Los Monos imputado en octubre por dirigir una banda, se reveló que la organización había apretado a candidatos que participaron en la elección comunal de Alvear. El grupo extorsionaba a sindicatos y tenía intenciones de jugar políticamente allí y en Villa Gobernador Gálvez. Pero aún no hay elementos para conectar este precedente con la balacera.
En este primer paso se le atribuyó a L. un ataque del que aún se desconoce el trasfondo, Carbone indicó que fueron claves las cámaras de vigilancia de la comuna. En el análisis detallado que realizó el centro de monitoreo de Alvear se precisó el recorrido de una moto Honda Wave roja que estuvo realizando un recorrido exploratorio entre la 0.46 y la1.45.
La moto entró a Alvear desde el norte, por ruta 21 y Rubini. Pasó por el domicilio de Pighín, se retiró hacia el oeste y dobló en U en Garibaldi y Brown. Luego realizó el recorrido inverso por la ruta en dirección a Villa Gobernador Gálvez. La casa de L., donde se encontró esa moto, queda a unos diez minutos de donde fue captada por el primer domo.
Esta es la moto roja a la cual se le salió una cinta que tapaba parte de la patente, lo que permitió reconstruir el dominio. En fotos extraídas de la filmación se pueden ver con bastante nitidez los rostros de los motociclistas. Según el fiscal, el conductor tiene la fisonomía de la cara del acusado, “su nariz y sus orejas”.
Casi una hora después entró en escena una segunda moto, una Honda Wave negra o azul oscura con la patente tapada. También ingresó desde el norte por la ruta, pasó frente al domicilio atacado y se desvió al sur hacia el polideportivo comunal. Enseguida regresó y salió por Garibaldi y Brown hacia el oeste. Ese recorrido duró entre la 1.56 y las 2.06. Esta vez los atacantes llevaban cascos, pero en ambas ocasiones el conductor vestía jean y zapatillas blancas.
En el domicilio de una hermana del acusado se secuestró una moto Honda Wave azul y negra. La mujer contó que la noche anterior Nicolás había estado en su casa jugando a la play station. Cuando se levantó temprano para ir a trabajar notó que la moto estaba embarrada. Su marido le dijo que se había prestado a Nico. “Pero jamás imaginé algo así”, dijo.
Fuente: La Capital