El reto de un liderazgo adaptativo se impone en la medida que el Empresario, hoy, camina en medio de la niebla, ante algunas incertidumbres económicas a futuro, y una disminución del consumo que impacta en su rentabilidad. La especialista en Coaching Político, Dirigencial y Empresario y además directora de arcoach.com.ar, Ale Rodríguez plantea que cuesta comprender bien a qué tipo de problema hay que hacer frente o, mejor dicho, cuál de todos los problemas atacar primero. En este panorama regido por la incertidumbre, el Coaching aporta estrategias que permitan afrontar este reto adaptativo. La profesional brinda algunos consejos:
1.- Subir al balcón: Ejercitar el cambio de visión. Trabajar para poder ver desde otros ángulos. Salir del microclima y de la corta distancia. Interactuar con referentes de nuestros sectores y de otros rubros, de manera de buscar claves de interpretación diferenciadas.
2.- Pensar políticamente: Construir redes, crear consensos, buscar socios y aliados saliendo del círculo de contactos conocidos. Ante problemas comunes buscar respuestas entre todos. Pensar políticamente implica lo contrario a aislarse, endurecerse, retraerse.
3.-Orquestar el conflicto: Crear un ambiente de contención o de urgencia de acuerdo con el pulso vital de nuestro staff o equipo. El liderazgo supone exhibir dotes de piloto de tormenta. Conducir con presencia y mano firme un conflicto permite que uno pueda –sino del todo en parte- dirigir el cambio y la nueva realidad.
4.- Mantenerse firmes: Ser resilentes, aprender a absorber los golpes, a saber madurar los temas, a focalizar la atención en los puntos claves y, también, a aceptar los limites.
Empezaremos a superar la crisis cuando mostremos condiciones para, como punto de partida, asumir el reto de administrarla. Trabajar propositivamente a partir de estas y otras claves es siempre mejor opción que quedar atrapado en el error de esperar exclusivamente que las soluciones provengan de un cambio de contexto.
El Día de la Madre es una de las celebraciones más populares en todo el mundo. Sin embargo, su fecha varía de un país a otro. En Argentina se celebra el tercer domingo de octubre.
Como parte del festejo por la llegada de la primavera, un negocio de Palermo puso flores en la vidriera y una señora se las llevó.
El significado y la razón por la cual se celebra el día del niño es el mismo en todo el mundo, a pesar de que las fechas varían según los países.