La Asociación de Nutrición Infantil (ANI) realizó una serie de recomendaciones para mantener la lactancia materna cuando los chicos empiezan el jardín maternal o la guardería.
"Es falsa la idea de que con la escolarización hay que poner punto final a la lactancia. Sin embargo, es importante prever la nueva situación y probar previamente con el bebé y la persona que lo va a alimentar el tipo de vasito o mamadera que se va a usar para administrarle la leche materna para una mejor adaptación", explicó Luciana Meni Battaglia, pediatra del Hospital General de Niños Pedro de Elizalde.
Otra de las claves para no destetar a los bebés que asisten a guarderías y jardines maternales es que la madre haya empezado a sacarse leche con anticipación, de manera de tener un buen stock almacenado en el freezer y/o la heladera. "Como la producción de leche está íntimamente relacionada con la demanda, mientras haya extracción de manera frecuente la generación no se detendrá", detalló Meni Battaglia. "Los fines de semana se puede optar por la libre demanda para satisfacer las necesidades tanto físicas como emocionales de ambos" concluyó.
Las autoridades sanitarias nacionales e internacionales y los expertos en nutrición infantil insisten en la necesidad de fomentar la práctica de la lactancia materna durante los primeros dos años de vida de un bebé. Si bien por sus beneficios nutricionales, inmunológicos y para el desarrollo infantil, nada puede superar a las cualidades protectoras de la leche materna, en los casos en los que esta no sea posible o por algún motivo resulte insuficiente, la mejor opciones es reemplazarla o suplementarla con una fórmula infantil.
A su vez recordar que antes de que el niño cumpla un año hay que evitar la introducción de leche de vaca como así también la de cabra, oveja, de arroz o soja. Los expertos en nutrición infantil recomiendan no introducir leche de vaca en la alimentación de un niño hasta que no haya cumplido el año de vida ya que contiene un alto contenido de sodio, excesiva cantidad de proteínas y escaso aporte de hierro y de ácidos grasos esenciales. El consumo frecuente de leche de vaca antes de los 12 meses puede tener implicancias negativas en la salud de los niños, como anemia, sobrecarga renal y lesiones intestinales.
Es tendencia entre mujeres de clase media y con educación superior. Sus partidarios aseguran que es más saludable para los niños, pero los críticos lo ven como otra forma.
Un nuevo estudio acarrea conclusiones que preocupan: el humo de segunda mano puede afectar al bebé de una futura mamá incluso antes de que ella quedara embarazada.
El estudio fue realizado en 15 países de Europa y América y asegura que el mismo porcentaje de mujeres no dejaría a sus parejas en esa situación. El sondeo determinó, además, que cerca de un 40% de los hombres nunca tuvo una relación con una persona con exceso de peso.