La maniobra de Heimlich pediátrica fue quien salvó al bebé de tan solo 21 meses que convaleciente y había llegado en brazos de su abuelo al cuartel de la localidad vecina a Rosario.
Un bombero voluntario de la localidad vecina de Oliveros le salvó la vida a un bebé de tan solo 21 meses que había dejado de respirar. El hecho ocurrió este domingo por la tarde cuando el niño, fue llevado de urgencia hacia el cuartel.
Según detalló el medio IRÉ, alrededor de las 14.30, el abuelo se presentó en el cuartel desesperado con el pequeño en brazos, solicitando ayuda inmediata. El menor mostraba claros síntomas de ahogamiento: no respiraba y se encontraba cianótico.
En ese momento, el bombero Axel Martínez actuó con reflejos certeros. De inmediato realizó la maniobra de Heimlich pediátrica y logró desobstruir las vías respiratorias del niño. Fue entonces cuando se escuchó el llanto del pequeño: Una señal de alivio que marcó el final de una angustia y el comienzo de una recuperación.
Minutos más tarde, personal del centro de salud comunal, una enfermera y la doctora de guardia, se hizo presentes en el cuartel y se encargaron del traslado del menor a la salita local para una evaluación más profunda.
Una adolescente recibió un disparo el cuello, en la zona oeste. Un hombre resultó baleado en el rostro y las piernas, en zona sur. Y un joven fue atacado con un arma blanca tras una presunta discusión de pareja.
Se registró este martes a media tarde en una zona cercana al puente de la ruta 34 que pasa por el curso de agua, a muy pocos kilómetros del acceso a Rosario por el noroeste. Se aguardan las pericias correspondientes para determinar la identidad y las circunstancias del hecho
Estrella Laurta Varela relató que su hijo estuvo preso durante un mes en febrero de 2024 por “desacato a la autoridad”, luego de violar la restricción perimetral que le había impuesto su expareja, y que en ese momento le solicitó a las autoridades “que no lo soltaran”
Fue en la zona de Yerua, a unos 35 kilómetros de Concordia, en el marco de la búsqueda de Martín Sebastián Palacio