El padre de Cristian Oyola estaba de viaje en Córdoba. Esta madrugada, cuando se enteró del trágico final de su hijo, sufrió un paro cardiáco. El joven trabajaba de policía para costearse los estudios universitarios
La familia del policía Cristian Oyola, asesinado anoche en un intento de robo frente a su casa, se vio sacudida por otra tragedia. El papá de Cristian, quien ayer estaba de viaje en Córdoba, falleció hoy al enterarse del trágico final que tuvo su hijo. Su corazón no resistió y sufrió una muerte súbita, según contaron al móvil de La Ocho allegados a la familia.
Cristian Oyola tenía 23 años y trabajaba en el Comando Radioeléctrico. Esta madrugada, cuando llegaba a su casa de Casilda al 1600, dos delincuentes quisieron robarle la moto y como se resistió lo mataron de un disparo en la cabeza.
"Siento un terrible dolor. Lo mataron como a un perro por una moto que ni siquiera se la llevaron. Así fue, en la puerta de la casa, y es un número más. Le tiraron tres veces a la cabeza ", afirmó Cintia, hermana de Cristian, en declaraciones a La Ocho. La joven contó que Cristian estudiaba la carrera de Ciencias Económicas y le faltaban seis materias para recibirse de contador público. "Mi hermano quería abastecerse solo en la carrera y por eso había entrado en la policía. Hacía su trabajo y lo hacía bien, tranquilo, no tenía problemas con nadie. Era una persona muy querida", agregó Cintia.
Una adolescente recibió un disparo el cuello, en la zona oeste. Un hombre resultó baleado en el rostro y las piernas, en zona sur. Y un joven fue atacado con un arma blanca tras una presunta discusión de pareja.
Se registró este martes a media tarde en una zona cercana al puente de la ruta 34 que pasa por el curso de agua, a muy pocos kilómetros del acceso a Rosario por el noroeste. Se aguardan las pericias correspondientes para determinar la identidad y las circunstancias del hecho
Estrella Laurta Varela relató que su hijo estuvo preso durante un mes en febrero de 2024 por “desacato a la autoridad”, luego de violar la restricción perimetral que le había impuesto su expareja, y que en ese momento le solicitó a las autoridades “que no lo soltaran”
Fue en la zona de Yerua, a unos 35 kilómetros de Concordia, en el marco de la búsqueda de Martín Sebastián Palacio