La investigación del asesinato de la mujer que en 2006 fue hallada desnuda y ahorcada en su casa de Córdoba se diluyó hasta quedar casi en foja cero. Evalúan ofrecer dinero para conseguir algún dato certero que la reflote
El domingo 26 de noviembre de 2006, Nora Dalmasso apareció sin vida en su lujosa vivienda del barrio Villa Golf (Córdoba). La habían asesinado unas 36 horas antes, durante la madrugada del sábado 25, mientras su esposo, Marcelo Macarrón, jugaba al golf en Punta del Este, Uruguay.
El caso conmocionó al país y logró mantener vigencia mediática por los detalles de una trama que puso a la víctima en un escenario plagado de juegos sexuales, con una lista interminable de amantes que incluyó a gente poderosa de la provincia serrana. Sin embargo, la investigación se diluyó lentamente porque casi todas las pruebas reunidas inicialmente perdieron su valor en los siete años que lleva una causa que se encuentra paralizada hace más de un año.
El caso tuvo tres imputados por el homicidio e innumerables hipótesis (falsas) que alimentaron el morbo: 1) Rafael Magnasco, ex asesor del gobierno provincial, a quien se vinculó con la mujer asesinada; 2) Gastón Zárate, el pintor de obra de la casa de la familia Macarrón Dalmasso, quien estuvo 24 horas detenido y quedó en el recuerdo como el "perejil" que se eligió para resolver un caso que quemaba por el impacto social que había generado; 3) Facundo Macarrón, el hijo de la víctima, quien, por una muestra genética que apareció en el lugar donde se encontró el cadáver, llegó a ser acusado de "abuso sexual gravemente ultrajante y homicidio calificado por el vínculo" contra su madre. Finalmente todos fueron sobreseídos y hoy no hay ningún acusado.
En ese contexto desalentador, el hermano de Nora Dalmasso, llamado Juan, comentó que su familia evalúa ofrecer dinero a quien aporte información que ayude a esclarecer el asesinato: "Hoy la única esperanza es que alguien se quiebre, por eso pensamos en ofrecer una recompensa".
"La investigación perdió el norte desde su comienzo, cuando al asesinato lo calificaron como un crimen pasional", reclamó el hermano de la víctima en declaraciones que difunde el diario Tiempo Argentino. "La trataron (a Dalmasso) como si se mereciera lo que había pasado", se quejó.
El abogado de la familia Dalmasso, Diego Estévez, apuntó que los familiares de sangre de Dalmasso "son benévolamente críticos de la actuación del fiscal (Javier di Santo) porque consideran que, aunque haya puesto mucho empeño, se equivocó".
Finalmente, el hermano de la víctima resumió el escenario actual: "La causa está paralizada y nosotros como querellantes nos encontramos limitados porque aportamos ideas e incluso hipótesis de investigación, pero no podemos acompañar a la policía a buscar a los sospechosos o tomar las declaraciones junto al fiscal".
Ocurrió este domingo a la tarde en el kilómetro 18 de esa traza provincial. En total hay al menos siete personas lesionadas, entre ellas una de mayor gravedad que fue trasladada en helicóptero sanitario al Heca. Intervinieron el Comando Radioeléctrico, varias unidades del Sies y Bomberos de Rosario y otras localidades.
La víctima estaba internada en el hospital Eva Perón de Granadero Baigorria desde el pasado 20 de octubre cuando intentó frenar una pelea a la salida del salón de eventos donde festejó los 15 su sobrina. Después de múltiples golpes, un joven de 19 años le propinó una patada en la cabeza mientras estaba en el piso. Este domingo se confirmó su deceso
Claudina se presentó en el Instituto Médico Legal para reconocer el cuerpo de su hija. "No puede seguir pasando esto, ni en San Lorenzo ni ninguna otra parte del país. Basta”, dijo.
El jefe de la Policía de Investigaciones, Natalio Marciani, confirmó que uno de los detenidos en la noche del jueves fue quien aportó información que les permitió encontrar el cadáver de la joven. “Todos nos hace presumir que la muerte fue cercana al día de la desaparición”, señaló