El muchacho tenía 20 años y estaba desaparecido desde el 7 de octubre. Sus padres reconocieron el cuerpo en el Instituto Médico Legal.
Rosario.- El cuerpo hallado ayer en el río sería de Franco Casco, el joven desaparecido el 7 de octubre pasado en la ciudad. El padre del chico habría identificado el cadáver en el Instituto Médico Legal en base a un tatuaje ubicado en uno de los brazos. El rostro no está en condiciones de ser reconocido.
El periodista Hernán Funes informó en A Diario (Radio 2) que este viernes a la mañana, Ramón Casco, el papá de Franco, el chico de 20 años que era buscado tras su desaparición en la ciudad el pasado 7 de octubre, identificó el cuerpo hallado ayer en el río, como el de su hijo.
Este jueves, personal de Prefectura halló flotando en el Paraná, a la altura del Parque España, el cuerpo de un hombre cuyo rostro estaba desfigurado. En el Instituto Médico Legal realizaron la autopsia correspondiente, donde pudieron establecer que llevaba al menos tres semanas en el agua.
Junto a la fiscal Mariana Prunotto, el padre del chico desaparecido, se presentó esta mañana en el edificio ubicado en Avellaneda y 3 de Febrero y pudo reconocer como el de su hijo al cuerpo analizado. El cadáver presenta un tatuaje en uno de los brazos con el nombre de “Thiago” y, según trascendió fue un signo revelador ya que el rostro está desfigurado.
De acuerdo a lo que se informó, Thiago es el nombre del hijo de Franco Casco, quien se lo habría tatuado a modo de homenaje al pequeño.
La víctima, de 22 años, se encuentra internada en el Heca con el 35% de su cuerpo quemado. La madre de uno de los sospechosos fue quien denunció el ataque ante la policía.
La pequeña se encuentra en estado crítico tras recibir el impacto del proyectil. La situación es preocupante y se prevé una operación para evaluar su condición.
Los robos se detectaron después de la hora cero del jueves en Cadaqués, cuando los damnificados llegaron a sus domicilios y notaron gran desorden. Personal de seguridad notó la apertura de un cerco perimetral en la parte trasera del predio.
Se trata de trabajadores del área de Control Interno que sustraían medicamentos y material descartable. Aceptaron su culpabilidad en un juicio abreviado y deberán pagar multas, además de quedar inhabilitados para trabajar en salud.
Los padres de alumnos de una escuela de Eldorado, Misiones, se enteraron horas antes de la graduación que el salón estaba impago. Romina Enriquez, la denunciada, reconoció que gastó el dinero en apuestas: "Tengo problemas con el casino"