Se cree que se habría suicidado pero la hipótesis del crimen no está cerrada. No están claros sus últimos pasos, qué ocurrió con la plata que tenía ni dónde está su moto. Tampoco se sabe por qué desaparecieron sus archivos.
Buenos Aires.- Para los investigadores de la muerte de Mariano Benedit, el asesor financiero de 31 años que fue encontrado muerto el miércoles en la Costanera Sur, todos los caminos llevan a que el joven se suicidó. En lo formal, sólo esperan para confirmarlo que alguna de las 30 cámaras de seguridad que hay en la zona lo ubiquen yendo solo hacia el lugar donde apareció su cuerpo. Pero todavía hay al menos cinco puntos oscuros que rodean al caso:
1. El motivo de su muerte.
Según el informe de la autopsia realizada por el Cuerpo Médico Forense, Benedit no presentaba lesiones previas y su muerte se debió a un disparo que ingresó por el lado derecho de su cabeza, cinco centímetros por arriba de la oreja, con trayectoria de abajo hacia arriba y de adelante hacia atrás, algo compatible con un suicidio. Su arma, una pistola Bersa Thunder calibre 9 milímetros, apareció tirada cerca de su mano derecha.
Luego se supo que el joven tenía restos de pólvora en esa mano, lo que indica que Mariano disparó un arma. Y casi dos días después del hallazgo del cuerpo, se encontró el casquillo de la bala calibre 9 milímetros a sólo un metro de donde estaba el cuerpo. Sólo resta saber si esa vaina se corresponde con la pistola que había junto al cuerpo.
Según fuentes del caso, todo cierra con un suicidio. La única posibilidad de que haya ocurrido otra cosa es que alguien lo haya inducido. O que haya montado muy bien un escenario falso. Por ahora, no hay nada que indique esto.
2. Qué hizo antes de morir.
El martes a las 10.30 de la mañana Benedit retiró dinero de una caja de seguridad que tiene su familia en la Bolsa de Valores, en el centro porteño. Fuentes del caso aseguran que sacó 250.000 dólares, pero todavía hay dudas sobre el monto exacto. Luego habría ido a su oficina de la calle Esmeralda 1066, donde dejó las llaves de esa caja, y pudo haber pasado por otro banco, aunque esto no está claro.
Según la denuncia de su familia, luego el asesor financiero pasó por su casa de Recoleta y salió de allí a las 12.30 en su moto. A las 12.24 llamó a un familiar por su celular y no volvió a usarlo. No se sabe a dónde iba: una hermana dijo que a las 13 se encontraría con ella, pero otros testigos afirmaron que iba a reunirse con un “cliente” al que nadie identificó aún.
Según la autopsia, Benedit habría muerto entre la medianoche del martes y la madrugada del miércoles. Los investigadores buscan establecer con quién estuvo en esas horas y qué hizo.
3. El destino del dinero.
La fiscal de la causa, Graciela Bugeiro, indicó que la víctima se encontraba en una “situación financiera complicada”. El “Gordo”, como lo apodaban sus amigos, le debía al menos 750.000 dólares a distintos acreedores y 600.000 pesos a bancos.
¿Qué pasó con los 250.000 dólares que retiró el martes? Una de las hipótesis apunta a la posibilidad de que el financista los haya jugado en el Casino de Puerto Madero. Incluso un testigo se presentó en la Fiscalía y aseguró que el martes vio a Benedit allí.
Sin embargo, fuentes del caso consultadas por Clarín pusieron en duda esto. “Las cámaras no registran a Benedit en el casino. Además los hombres de seguridad que trabajan en el lugar están acostumbrados a reconocer gente y ellos están seguros de que allí el martes no estuvo”, dijeron. Si no fue a jugar a ese lugar, ¿a dónde fue a parar la plata?
4. Dónde está la moto.
El martes Benedit salió de su casa en su moto Honda Tornado 250 blanca. Pero el vehículo nunca fue encontrado.
Tal como anticipó Clarín, el viernes se presentaron a declarar dos testigos que aseguraron haberla visto estacionada el martes, alrededor de las 19, a metros de donde luego fue hallado el cadáver de Benedit. Hablaron de una moto blanca con un casco apoyado sobre el manubrio. Por eso los investigadores especulan con que alguien que no está relacionado con la muerte del asesor la podría haber robado.
Otra posibilidad es que Benedit la haya dejado en algún estacionamiento. Para poder determinarlo es fundamentar analizar las cámaras de seguridad.
5. Los archivos borrados.
Miguel, uno de los seis hermanos de Mariano, aclaró desde un principio que el joven era asesor financiero y que no trabajaba en la empresa de la familia, “Benedit Sociedad de Bolsa”. Había pertenecido a su directorio hasta fines de 2013 y no se sabe por qué se alejó.
Los investigadores creen que parte del entorno de Benedit sabe más de lo que contó sobre sus actividades. Pero temen ser investigados.
De acuerdo a la investigación, el joven manejaba dinero de distintas personas desde una “cueva” financiera que funcionaba bajo la fachada de una agencia de turismo, en las oficinas de la calle Esmeralda. Así se habría endeudado por cifras “millonarias”.
Los investigadores quieren hablar de esto con el socio de Benedit, llamado Francisco Brigiler, pero no saben dónde está. Antes de que apareciera el cuerpo le pidieron las llaves de la oficina que compartían y las envió con un cadete. El jueves la División Homicidios la allanó y se encontraron con que alguien se había llevado todas las computadoras. ¿Qué escondían? También fueron a la casa del joven –que había sido padre 15 días antes de su muerte– y secuestraron otra computadora. En un primer análisis determinaron que habían sido borrados decenas de archivos de manera reciente.
La víctima estaba internada en el hospital Eva Perón de Granadero Baigorria desde el pasado 20 de octubre cuando intentó frenar una pelea a la salida del salón de eventos donde festejó los 15 su sobrina. Después de múltiples golpes, un joven de 19 años le propinó una patada en la cabeza mientras estaba en el piso. Este domingo se confirmó su deceso
Claudina se presentó en el Instituto Médico Legal para reconocer el cuerpo de su hija. "No puede seguir pasando esto, ni en San Lorenzo ni ninguna otra parte del país. Basta”, dijo.
El jefe de la Policía de Investigaciones, Natalio Marciani, confirmó que uno de los detenidos en la noche del jueves fue quien aportó información que les permitió encontrar el cadáver de la joven. “Todos nos hace presumir que la muerte fue cercana al día de la desaparición”, señaló
Lo halló la Policía de Investigaciones tras allanamientos que realizó en la noche de este jueves en Puerto General San Martín, donde había sido secuestrado un 308 gris que se presume que tendría relación con la desaparición de la joven de 20 años que había sido vista por última vez el 30 de octubre.
Se trata de Kevin Leonardo Ayala, quien además está investigado como posible partícipe en el homicidio del policía Andrés Farías, que tuvo lugar el pasado 27 septiembre en Fisherton. Al momento de ser acusado en Rosario tenía la llave de unas esposas en su ropa interior