El ministro de Seguridad, la jueza Rodenas, el jefe policial Miranda, el presidente leproso Lorente y el vice canalla Fernández, entre otros, se reunieron para consensuar los detalles de los controles de seguridad del partido del domingo. Habrá unos 700 efectivos entre el estadio de Central y otros puntos de la ciudad
El "operativo clásico" reunió este jueves a la noche a todas las partes en cuestión -provincia, municipio, Policía, Justicia y los clubes- para "ajustar" los detalles del plan de seguridad en el polémico partido que jugarán Central y Newell´s el domingo en el Gigante de Arroyito.
El ministro de Seguridad de la provincia, Raul Lamberto, confirmó antes de ingresar a la cumbre en los Tribunales provinciales, que el "partido se juega". El operativo de seguridad contará con unos 700 efectivos, en el estadio y otros puntos, y ocho vallados en el Gigante.
El encuentro comenzó pasadas las 19 en los Tribunales provinciales junto a la jueza Alejandra Rodenas, a 72 horas del primero de los dos clásicos.
El presidente de Newell´s, Guillermo Lorente, y el vice de Central, Rubén "Pitu" Fernández, participaron del encuentro, además del jefe de la Policía Walter Miranda, el secretario de Gobierno municipal Fernando Asegurado y el subsecretario de Seguridad Ciudadana local, Luis Baita.
Tras más de dos horas de reunión, el primero en retirarse fue Baita, quien contó a los medios presentes que el partido estaba confirmado. La reunión avanzaba en detalles de los operativos paralelos en la ciudad. Es que más allá del control en el estadio de Central, con unos 500 efectivos, otros 200 harían seguimiento en más de diez puntos de la ciudad, informó la periodista de Canal 3 en el lugar, Almudena Munera Munóz.
Lamberto anticipó más temprano la convocatoria, a la par que confirmó que el clásico se juega. Fue tras dos jornadas de hechos violentos y después de reunirse con la jueza Rodenas.
Antes, en horas de la mañana de este jueves, el gobierno provincial volvió a confirmar la realización del partido entre Rosario Central y Newell´s a pesar de que se conoció un nuevo atentado, esta vez contra el reconocido hincha de Central, Gonzalo Lanzarinni. El ministro de Seguridad defendió la realización del encuentro ya que según indicó, forma parte de la cultura local. Sin embargo, advirtió que su intención no está viciada de irracionalidad.
En contacto con el programa A Diario (Radio 2), Lamberto sostuvo con respecto al partido del domingo: “Estamos evaluando los hechos que, sin duda, son preocupantes. Esta decisión la tomaron los clubes y la empresa organizadora y a nosotros nos corresponde garantizar la seguridad”.
Consultado sobre si no temía las consecuencias de promover el partido, teniendo en cuenta que el anterior ministro de Seguridad, Leandro Corti renunció en el marco de otro clásico deportivo, respondió: “Si se suspende, ganaría la violencia”, remarcó pero agregó: “Esto tiene límites, si se hace intolerable, las medidas serán otras”.
“Estoy convencido que el deporte es parte de la cultura”, sostuvo. “Lo defiendo con convencimiento personal y no irracional. Lo fácil es suspender pero así terminan ganando los violentos”, subrayó.
El ministro recordó que se dispondrán 500 efectivos policiales, que se afectarán vehículos e incluso un helicóptero como elemento disuasivo. “Estaremos en puntos críticos de concentración de las hinchadas y reforzaremos las zonas aledañas a los estadios”, precisó. Luego, advitió: “El operativo se irá modificando de acuerdo a las realidades que se presenten”.
Estos detalles serán informados hoy a la jueza Alejandra Rodenas y a la fiscal Nora Marull, quienes solicitaron una reunión con el ministro. “La preocupación del poder Judicial ayuda, siempre es bueno que todos asumamos la responsabilidad, es bueno coordinar y que nadie trate de sacarse el sayo”, observó.