El comercio pertenece a la firma Dar. Hasta el mediodía el gremio estuvo volanteando en las puertas del súper de Washington y Rondeau.
La Asociación de Empleados de Comercio (AEC) denunció esta mañana que un local local de la cadena de supermercados Dar abrió sus puertas este domingo, pese a la vigencia de la ley 13.441 de descanso dominical.
"Cadena pone policías para esperar a los trabajadores violando la ley de cierre dominical", señaló el gremio a través de su cuenta de Twitter. Desde el sindicato mercantil indicaron a La Capital que el local abrió sus puertas a las 9 fue el de Washington y Rondeau. Además advirtieron que también habría abierto el de Córdoba y Gutenberg, aunque una recorrida de La Capital realizada este mediodía constató que el comercio estaba cerrado.
Walter Pereyra, delegado de los trabajadores de Dar, contó a este medio que "si bien tienen otra razón social, el descanso dominical igual corresponde" que se aplique en estos locales. "Ellos ya habían intentado abrir con el argumento que la ley no los alcanza, el de Gutenbeg está habilitado como autoservicio, pero la ley habla de grandes superficies y entonces se tienen que sumar todos lo metros cuadrados", apuntó el trabajador.
Según la ley provincial, sólo pueden abrir los domingos y feriados los comercios atendidos por sus dueños o menores a 120 metros cuadrados, farmacias y locales ubicados en estaciones terminales de ómnibus, entre otras pocas excepciones.
Ante esta apertura, delegados de Empleados de Comercio realizaron esta mañana una volanteada en las puertas del Dar de Washington y Rondeau "para concientizar y pedir solidaridad a los clientes que no compren el domingo", expresó Pereyra.
Se realizó en Rosario un encuentro de trabajo con funcionarios provinciales y de gobiernos locales y representantes del sector privado. El objetivo es minimizar o disminuir los grandes congestionamientos de camiones.
Desde el sector advirtieron sobre las complicaciones que puede tener el cliente al momento de manipular la manguera por su cuenta. “En los 90, cuando se aplicó, la mayoría dejó rápidamente de vender. Nadie quiere ensuciarse las manos con petróleo”, dijeron desde el Sindicato de Trabajadores de Estaciones de Servicio