La anciana preparó unas masitas que su nieta llevó al jardín de infantes, pero se equivocó de bolsa y le puso veneno para ratas en lugar de confites. Los nenes intoxicados están fuera de peligro.
Una abuela quiso decorar los cupcakes que su nieta iba a llevar para compartir con los compañeros del jardín de infantes pero su buena intención casi termina en tragedia.
Es que la anciana de Mendoza se equivocó de bolsa a la hora de decorar las masitas y en lugar de confites les puso veneno para ratas.
Los familiares de la mujer advirtieron el error a tiempo y llamaron para advertir a las autoridades del jardín. Sin embargo, diez chicos de 4 y 5 años resultaron intoxicados y tuvieron que ser trasladados por sus padres al hospital pediátrico Húmero Notti, donde fueron asistidos y ya están todos fuera de peligro.
La Defensoría del Pueblo de la localidad en la que se dio la situación reveló que lo que molesta a la denunciante es que "los vecinos comen asado" y que "no hay otro tipo de problema"
"Usuarios enojados" es la página de Facebook que reúne las quejas de los usuarios del servicio de la empresa Güemes, único directo entre ambas ciudades. Desde cucarachas y mugre en las unidades hasta roturas de los coches a mitad de camino aparecen en el menú de reclamos.
La actividad solidaria terminó en un gran escándalo cuando se descubrió el intento de robo.
Un abuelo repartió billetes de 200 pesos a los pasajeros del tren Sarmiento, con destino a la localidad bonaerense de Moreno, y el insólito gesto se viralizó en forma inmediata en las redes sociales. "La plata estaba envuelta en un papel, todos pensamos que estaba pidiendo alguna colaboración", dijo un testigo.