Sergio, su papá, habló sobre los logros del pequeño dentro del colegio San José con una escolaridad completa en integración y como alumno regular sin la escuela Especial.
El 2022 termina de una manera especial para la familia Kuszlack. Facu, el más pequeño, terminó la escuela primaria y se convirtió en el primer niño con discapacidad que realiza toda la trayectoria escolar como alumno regular sin la participación de la escuela Especial.
Y el logro no es por casualidad ni por arte de magia, la suma de voluntades y el amor de la familia hicieron posible lo que parece lejano: “Recurrimos hasta el Ministerio de Educación para firmar los documentos necesarios”, contó el papá de Facundo y fue más a fondo: “Desde que comenzó la primaria nos dijeron que teníamos que matricularlo en la escuela Especial, pero nosotros creemos que dicha institución no debe estar separada sino tiene que estar incluida en todas las escuelas así todos los chicos comparten desde sus inicios en la educación un espacio común”, con este análisis se refirió al aislamiento en la sociedad de los niños con discapacidad: “Luego es muy difícil integrarlos una vez que finalizan el secundario”.
En lo que respecta a lo emocional, Sergio confesó que “es el fin de un ciclo que no fue fácil” pero que como familia intentaron dar y brindarle todo lo que necesitó “con muchos errores pero también con muchos aciertos”: “Lograr una inclusión total no es tarea sencilla, demanda estar siempre alerta a las necesidades que van surgiendo”, sostuvo.
“Facu lo vivió feliz. Él ama ir a la escuela con sus pares, compartir todas las actividades con sus compañeros, adaptándolo a sus posibilidades y necesidades”.
Por otra parte, Kuszlack manifestó que el proceso requiere la información constante en todo lo que tiene que ver con discapacidad y educación, desde las leyes hasta las terapias para favorecer el aprendizaje pero “cuando se ven los avances, las energías se renuevan y se sigue para adelante”: “Fueron años difíciles, en donde nos tuvimos que poner desde cero a estudiar, aprender, a vivir con los avances y también con los momentos en donde todo se estanca y parece que no avanza”, declaró.
“El colegio San José nos abrió sus puertas y transitamos juntos esta etapa desconocida de inclusión total escolar. Facu va a cursar el secundario en la escuela Comercial y ya estamos trabajando en ello junto a todo el equipo interdisciplinario, directivos y docentes”.
Para finalizar, el hombre dejó un mensaje para todas las personas que tienen un Facu en sus vidas: “Todo niño tiene derecho a la educación. Por eso, papás, no se dejen desanimar. Luchen por lo que le corresponde a sus hijos”, indicó y cerró orgulloso por lo logrado y con fuerzas para seguir: “Todo lo que podemos hacer por ellos es para que puedan ser incluidos en esta sociedad”.
El Intendente y la directora de Desarrollo Social, la semana pasada, firmaron con el ministerio de Igualdad y Desarrollo Humano de Santa Fe, un convenio para recibir fondos que permitan fortalecer el área de la Mujer, Género y Diversidad, que parece funcionar en ciertos casos, menos cuando se trata de actuar en un episodio de supuesto maltrato hacia una empleada municipal por parte de un miembro del nutrido y extenso gabinete.
El profesional que había sido llamado al principio de la gestión de Daniel Tonelli y había dejado por diversas cuestiones, ahora sí ya trabaja oficialmente en la secretaría de Salud, apuntado claro está al sector de Zoonosis. Lo hace en carácter de monotributista.
El hijo de Adriana Farroni, que está en Obras Públicas, maltrató a Laura Sánchez, empleada municipal de carrera, y desde el Gobierno de Daniel Tonelli ni del área de la Mujer local "le llamaron la atención". Además, ya había tenido un altercado fuerte con Gustavo De Lorenzi, y todo sigue igual. Ser "hijo de" evidencia los beneficios y la falta de tacto de un gobierno que no lo tiene en casi nada.