Escenas de pánico y temor se vivieron cuando se escuchó una explosión y una nube de vapor comenzó a salir desde la usina Sorrento ubicada en la zona norte de la ciudad de Rosario.
La paz y tranquilidad de la zona norte de la ciudad de Rosario se vio sacudida por una serie de estruendos y detonaciones, las que fueron seguidas por una nube de vapor que generó temor entre los vecinos y entre quienes pasaban circunstancialmente por el lugar.
Finalmente y tras una serie de averiguaciones, voceros de la empresa le confirmaron a LaCapital que la empresa estaba realizando tareas de limpieza.
"Los vecinos fueron informados a principios de la semana por la Municipalidad”, dijo el portavoz de la empresa, aunque según los vecinos el la información llamativamente no fue difundida a pesar de que iba a generar la lógica preocupación entre los habitantes del barrio.
“Estaba corriendo por el Paseo Ribereño cuando, cerca de las 18.48, vibró el pavimento y se oyó un ruido ensordecedor”, dijo a este diario un vecino de Arroyito muy sorprendido. “Hace 15 años que vivo acá y nunca vi ni escuché una cosa como ésta”, añadió. "Fue como un terremoto", alertó otro.
Al margen de la alama de los vecinos, un directivo de la compañía señaló que “se tomaron todas las precauciones técnicas y de seguridad para llevar a cabo esta acción absolutamente programada destinada a limpiar y reparar la central que estaba parada y está a punto de ponerse en funcionamiento”, subrayó.
Posteriormente, y una vez superado el estupor y susto inicial, que incluso llevó a más de uno a pensar en consecuencias imprevisibles, de a poco el barrio fue retomando la calma.
Con 46 casos confirmados y probables en lo que va de 2025, Santa Fe es la segunda provincia más afectada después de Buenos Aires. El sur provincial suma riesgo tras las inundaciones por la tormenta de Santa Rosa
El inicio, poco antes del mediodía de este jueves, fue en una playa de estacionamiento de camiones cerca del centro urbano de la ciudad ubicada a unos 52 kilómetros de Rosario. El combustible encendido comenzó a derramarse por la zona.
Alejandra, la titular de Sophies Pattiserie, denunció el miércoles que ocho jóvenes consumieron en el bar, pero la estafaron. Este jueves, una de las implicadas fue al local y pagó la cuenta.
La masiva caravana partió desde la planta “General Savio” (ex-Somisa) y copó el centro de la ciudad en rechazo al apagado del alto horno, los despidos y la precarización laboral que enfrentan más de 1.200 obreros tercerizados del Grupo Techint.