Pablo Miño, el asistente de Carlos García, obtuvo la libertad condicional aunque quedará vinculado a la causa hasta que se resuelva su situación procesal. La fiscal dictaminó favorablemente y el juez entendió que “no tuvo injerencia” en los trabajos previos a la explosión
Rosario.- Pablo Miño, el ayudante del gasista que trabajaba en el edificio de Salta 2141 el martes pasado cuando se produjo la explosión, obtuvo la libertad condicional aunque quedará vinculado a la causa hasta que se resuelva su situación procesal definitiva. Así lo confirmó José Nanni, uno de los abogados del asistente junto a Paul Krupnik, al salir este viernes de los Tribunales provinciales.
“Habiendo tenido dictamen de la fiscal, el juez entendió que no habiendo ningún tipo de injerencia del asistente se le debía otorgar la libertad”, expresó el abogado.
Por otra parte, explicó que el juez debe resolver ahora la situación procesal de Pablo Miño que –según el equipo legal que lo patrocina– se “encamina al sobreseimiento definitivo” porque “quedó demostrado que tuvo nula participación” en el siniestro.
En tanto, estaba más complicada la situación procesal del gasista Carlos García y la posibilidad de que obtenga la libertad.
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