En Reconquista las autoridades van a desplazar a todos los habitantes del barrio Puerto debido al avance de las aguas, que ascendieron hasta 78 centímetros por encima del nivel de evacuación.
El nivel del río Paraná en el puerto de Santa Fe ingresó hoy en el nivel de alerta y continuaba creciendo, en tanto en la localidad de Reconquista las autoridades van a desplazar a todos los habitantes del barrio Puerto debido al avance de las aguas, que ascendieron hasta 78 centímetros por encima del nivel de evacuación.
La última medición de Prefectura Naval Argentina para la estación fluvial de Santa Fe dio cuenta de una altura de 5,40 metros y en creciente, es decir 10 centímetros por encima del nivel de alerta y a 30 centímetros del de evacuación.
Ese registro complicó especialmente a los habitantes de Vuelta del Paraguayo, en jurisdicción de la capital provincial, donde 23 familias debieron evacuarse en refugios levantados en el ingreso al barrio.
La situación es más complicada en el barrio Puerto de Reconquista, que cuenta con una población estimada en 3.000 personas, donde el río medía hoy 6,08 metros y el nivel de las aguas amenazaba a la totalidad de las viviendas.
Las autoridades preparaban una evacuación masiva para las próximas horas y allí se diagramó un operativo conjunto entre Prefectura, Defensa Civil y la Municipalidad de Reconquista con la realización de “recorridas y verificaciones del estado de los habitantes ribereños e isleños y de sus bienes”.
Ante el avance de las aguas se iban efectuando cortes preventivos de energía y se restringió el acceso para personas y vehículos que no puedan justificar su presencia en el lugar, además de emitirse un alerta por presencia de reptiles, insectos y otros animales.
El municipio de Reconquista, organizaciones sociales y ONGs reciben donaciones para los afectados en el Complejo Cultural La Estación, donde iban a ser clasificadas y posteriormente entregadas en los centros de evacuados.
La medida de fuerza, en todas las plantas del país, comenzó al mediodía del lunes, luego de que la Cámara de Diputados obtuviera quórum para debatir la nueva Ley Bases. Concretamente, los trabajadores aceiteros se oponen a la reforma laboral y a la restitución de la cuarta categoría del Impuesto a las Ganancias.
El gobernador se refirió a los trece autos incendiados, el taxi baleado y las amenazas a colectiveros. “Ante estos ataques es muy difícil que el Estado se pueda adelantar. Pero trabajamos, ponemos recursos a disposición y aseguramos que los responsables siempre terminan cayendo”, sostuvo