Se las ingeniaba para forjar vínculos estrechos con los comerciantes de la zona. Así se ganaba la confianza para llevarle la contabilidad a pequeños contribuyentes: propietarios de granjas, quioscos, ferreterías y peluquerías, entre otros rubros comerciales. Hasta que ayer se llevó a cabo un allanamiento en Castellanos 544 y se procedió a la detención de este falso contador que estafó a más de 50 clientes y que le generó un fraude fiscal a la Administración Provincial de Impuestos (API) por un monto cercano a los 2 millones de pesos.
Esta tarde, entre las 13 y las 15, la fiscal Valeria Haurigot, de la Unidad de Investigación y Juicio del Ministerio Público de la Acusación, pedirá la prisión preventiva para Edgardo R., en la audiencia imputativa que se celebrará en los Tribunales.
El allanamiento dispuesto por la fiscal Haurigot y autorizado por el juez Héctor Núñez Cartelle, se realizó ayer con la intervención de veedores del Colegio de Gestores de API y del prosecretario de la Fiscalía Gastón Ávila. Allí mismo se produjo la detención de Edgardo R.
A este falso contador se lo imputará por estafas y por la simulación dolosa de pagos en concepto de Ingresos Brutos por una suma aproximada de 2 millones de pesos. En la investigación que lleva adelante Fiscalía, se relevaron cerca de 2 mil declaraciones juradas truchas. “Ya había sido imputado el año pasado por la usurpación de título, ya que es gestor y no contador”, recordó la fiscal Haurigot, luego de que un ex empleado de Edgardo R. lo denunciara por falsificación de sellos.
Prestaba servicios de contaduría y le generó un perjuicio al fisco provincial de 2 millones de pesos sin intereses. Y tras la denuncia de un cliente, Fiscalía volvió a tomar intervención y dispuso el allanamiento de toda la documentación en las oficinas ubicadas en barrio Agote y se constató que el falso contador había estafado a más de 50 pequeños comerciantes. Desde la pesquisa indicaron que a través de una maniobra, Edgardo R. hacía fraude a la API ingresando pagos en cero con el mismo agente de retención y percepción, cuando ya les había cobrado dichas liquidaciones.
El atentado se registró el lunes a la madrugada en la dependencia ubicada en Fader al 3100. No hubo heridos, pero tuvieron que intervenir Bomberos Zapadores.
El caso tiene la particularidad de que el agresor es prácticamente ciego. Ocurrió en una vivienda de pasillo en el asentamiento de Liniers y Tupac Amaru antes del amanecer de este sábado. La escena estaba repleta de botellas de alcohol. El agresor se entregó y la Policía secuestró el arma homicida
El primer ataque se produjo el jueves por la noche contra la institución ubicada en Felipe Moré al 2200. El segundo hecho ocurrió en Constitución al 3200, donde está el establecimiento educativo "Gendarmería Nacional".
No hay indicios de amenaza contra su dueña, una vecina del barrio Vía Honda. Al momento la investigación no relaciona el hecho con los coches quemados días atrás