Los realiza la Policía de Investigaciones por solicitud de los fiscales Franco Carbone, Pablo Socca y Federico Rébola. Todos los operativos están dirigidos a familiares de presos de Piñero que están alojados en tres pabellones.
Desde la mañana de este jueves se llevan a cabo 46 allanamientos en Rosario, Villa Gobernador Gálvez y Pueblo Esther como consecuencia de las amenazas al gobernador Maximiliano Pullaro (@radio2)
Desde la mañana de este jueves se llevan a cabo 46 allanamientos en Rosario, Villa Gobernador Gálvez y Pueblo Esther como consecuencia de las amenazas al gobernador Maximiliano Pullaro y a los atentados ocurridos entre el martes y el miércoles contra una sucursal del banco Macro de Saavedra y Ovidio Lagos, el hospital de emergencias Clemente Álvarez y una escuela de Cochabamba al 5500. Los operativos fueron solicitados por Franco Carbone, Pablo Socca y Federico Rébola, fiscales de la unidad de Balaceras.
Los ataques, según afirmó este miércoles el ministro de Seguridad Pablo Cococcioni, son la reacción a los cambios en las políticas penitenciarias que se pusieron en marcha desde la asunción del nuevo gobierno, que reubicó presos dentro de las cárceles y al mismo tiempo trasladó a reclusos que estaban en comisarías a unidades penitenciarias.
La causa, que lleva pocas horas, tiene dos hipótesis sobre la firma de las notas arrojadas en la puerta del Heca y del banco Macro, donde se hace alusión al pabellón 9 de la cárcel de Piñero. Una es que un recluso que estaba alojado en ese sector del complejo penitenciario haya sido trasladado recientemente al sector de alto perfil y haya buscado dar vuelta atrás la decisión a través de la planificación de balaceras que generaron conmoción pública.
El preso en cuestión, según se investiga, fue delegado del pabellón 9 y fue llevado a alto perfil en una fecha anterior a la masiva reubicación ocurrida el martes pasado. Se trata de uno de los presuntos cabecillas de la organización que lidera el condenado jefe narco Julio Andrés Rodríguez Granthon.
La otra línea investigativa que tienen los fiscales es que reclusos de los pabellones 6, 7 y 8 que el martes pasado fueron objeto de reubicación de reclusos –sacados de esos sectores comunes y llevados a lugares para alto perfil– hayan querido “tumbear” a los que estaban en el pabellón 9, donde ese día no se hicieron movimientos de internos.
La víctima estaba internada en el hospital Eva Perón de Granadero Baigorria desde el pasado 20 de octubre cuando intentó frenar una pelea a la salida del salón de eventos donde festejó los 15 su sobrina. Después de múltiples golpes, un joven de 19 años le propinó una patada en la cabeza mientras estaba en el piso. Este domingo se confirmó su deceso
Claudina se presentó en el Instituto Médico Legal para reconocer el cuerpo de su hija. "No puede seguir pasando esto, ni en San Lorenzo ni ninguna otra parte del país. Basta”, dijo.
El jefe de la Policía de Investigaciones, Natalio Marciani, confirmó que uno de los detenidos en la noche del jueves fue quien aportó información que les permitió encontrar el cadáver de la joven. “Todos nos hace presumir que la muerte fue cercana al día de la desaparición”, señaló
Lo halló la Policía de Investigaciones tras allanamientos que realizó en la noche de este jueves en Puerto General San Martín, donde había sido secuestrado un 308 gris que se presume que tendría relación con la desaparición de la joven de 20 años que había sido vista por última vez el 30 de octubre.