El efectivo, identificado como Esteban Espíndola, fue detenido con una de las armas que se habría utilizado para balear la casa del gobernador de Santa Fe. Ante la jueza, se negó a declarar.
El policía rosarino que fue detenido con una de las armas que se habría utilizado en el ataque a balazos contra la casa del gobernador de Santa Fe, Antonio Bonfatti, se negó a declarar y quedó imputado como parte de la organización que cometió el ataque.
Fuentes judiciales informaron que la jueza de instrucción María Luisa Pérez Vara convocó a declaración indagatoria al policía Esteban Espíndola, quien se negó a declarar. El efectivo policial quedó imputado por el atentado que sufrió el mandatario provincial el 11 de octubre en su vivienda, ubicada en el barrio Alberdi de Rosario.
Espíndola es un suboficial que prestaba servicios en la seccional 10ma de Rosario, la misma que tiene jurisdicción sobre el domicilio del gobernador, y fue detenido el jueves por la tarde en un Peugeot 206 en el que se encontró una pistola Colt 11.25, informaron fuentes del caso.
El ministro de Seguridad de Santa Fe, Raúl Lamberto, confirmó que las pericias efectuadas al arma arrojaron una "alta compatibilidad" con la empleada en el atentado al gobernador. "Si bien siempre se hacen contra pruebas, la primera pericia que se hizo sobre el arma que tenía el policía daba una compatibilidad muy alta", dijo el funcionario.
Leopoldo Monteil, abogado defensor de Espíndola, explicó que su cliente se negó a declarar porque todavía no vio el expediente y no conoce las pruebas. Asimismo, detalló que el policía fue imputado de "amenazas calificadas por su carácter anónimo y el empleo de arma de fuego, abuso de armas, daño calificado y, subsidiariamente, haber encubierto con ánimo de lucro el hecho".
Por su parte, el fiscal del caso, Aníbal Vescobo, explicó que las armas utilizadas en el atentado cometido por cuatro personas que se movilizaban en dos motos contra la vivienda del gobernador fueron dos: una pistola 11.25 y otra 9 milímetros.
El funcionario judicial añadió que la pistola 9 milímetros fue la misma que se empleó en noviembre en un ataque a balazos contra la vivienda de un jefe de Drogas Peligrosas, Alejandro Franganillo, según las pericias de los caquillos recogidos en ambos lugares.
Además, esa arma, que aún no fue encontrada, habría sido utilizada también cuatro días antes del ataque a Bonfatti en un homicidio ocurrido en la zona noroeste de Rosario.
Ocurrió este domingo a la tarde en el kilómetro 18 de esa traza provincial. En total hay al menos siete personas lesionadas, entre ellas una de mayor gravedad que fue trasladada en helicóptero sanitario al Heca. Intervinieron el Comando Radioeléctrico, varias unidades del Sies y Bomberos de Rosario y otras localidades.
La víctima estaba internada en el hospital Eva Perón de Granadero Baigorria desde el pasado 20 de octubre cuando intentó frenar una pelea a la salida del salón de eventos donde festejó los 15 su sobrina. Después de múltiples golpes, un joven de 19 años le propinó una patada en la cabeza mientras estaba en el piso. Este domingo se confirmó su deceso
Claudina se presentó en el Instituto Médico Legal para reconocer el cuerpo de su hija. "No puede seguir pasando esto, ni en San Lorenzo ni ninguna otra parte del país. Basta”, dijo.
El jefe de la Policía de Investigaciones, Natalio Marciani, confirmó que uno de los detenidos en la noche del jueves fue quien aportó información que les permitió encontrar el cadáver de la joven. “Todos nos hace presumir que la muerte fue cercana al día de la desaparición”, señaló